Se limaba las uñas con alguna piedra del camino. No le gustaban las normas y por encima de todo detestaba el olor a cuero del talabarte de su padrastro. Había emprendido un éxodo sin saber el significado de la palabra, a sus siete años no le había dado tiempo a aprenderla. La puerta estaba abierta y lo único que hizo fue correr. Ahora, entre sollozos nocturnos llama a gritos a su madre, buscando sus brazos y su aliento. Al alba, ante él, se dibuja su nuevo hogar, un altozano de basura y en su espalda el recuerdo del maldito olor del cuero.
Me parece un micro espectacular, que cuenta la huida de un niño y la vez es la representación de la palabra huída en si misma. Es preferible vivir entre basura a vivir sometido. Me gusta.
ResponderEliminarfelicidades.
Gracias Fernando. Has acertado plenamente la idea que me llevó a crear el micro: historia con definición de palabra.
EliminarUn abrazo!
P.D: Me gusta hacer experimentos...
¡Durísimo! El inicio de la última frase me hace pensar en alguna referencia a Alba, la niña que quedó imposibilitada después de una agresión criminal (que ahora va a quedar en unos añitos de cárcel...). Un impactante homenaje a esta "otra realidad" del ser humano. Un abrazo, Mónica.
ResponderEliminarGracias Susana. Tristemente la realidad supera la ficción, no lo hice motivada con ese horrible suceso. La violencia infantil es una cosa que jamás entenderé y me emociona sobremanera cuando ocurre.
EliminarUn abrazo!
Si tuvieran que definirse las palabras en el diccionario de la RAE con cuentitos (cosa que sería muy interesante) en la entrada del vocablo Huida, primera acepción, estaría tu micro de hoy.
ResponderEliminarEstupendo
Abrazos
Gracias Xesc. Muy interesante ese diccionario! Como ya he comentado a Fernando, jugué a intentar definir/contar.
EliminarUn abrazo!
Un micro desolador, Mónica, en el que la búsqueda de la felicidad nos arroja al vertedero.
ResponderEliminarHas escrito un texto de enorme calidad literaria, con una carga emocional que pesa en el lector.
Mis aplausos.
Un abrazo
Muchas gracias por tus palabras Pedro.
EliminarMe alegro que disfrutaras con la lectura, un honor leer vuestros comentarios!
Un abrazo!
Tu micro, Mónica, es un como un aténtico correazo. Además está escrito con mucha exquisitez. Precioso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Miguel Ángel. Me gusta lo de "correazo".
EliminarGracias una vez más.
Un abrazo!
Creo que es el segundo que te leo. Creo que me estoy perdiendo buenos relatos. Seguro. En este me gustaría destacar como el "olor a cuero" sustituye al dolor de los golpes, es decir, como la autora dice sin decir.
ResponderEliminar