Y no intentes escabullirte que no te va a servir de nada. Te he comprado un trozo de nube, estoy negociando la otra mitad con Paquita, la del quiosco. Mi asiganción semanal no da para más. Esta vez te prometo no distraerme ni temblar, te miraré de frente y seré comedido, sólo te pido que no tengas en cuenta mi torpeza. El otro día, en la acequia, nuestros labios se estrellaron. Hoy no habrá colisión. Lo he leído en un libro. Lo que tengo que hacer es darte el beso a distancia, dejarlo en mi mano y soplar.
Un beso volado, una imagen de la inexperiencia de la infancia, de esos primeros pasos timoratos hacia un universo desconocido y lejano que como un agujero negro nos atrae y nos magnetiza.
ResponderEliminarHoy en día ya no sería así, lamento decirlo, pero creo que en general están más sueltos.
Saludos
Qué bonito, es muy tierno y lírico.
ResponderEliminarAbrazos
Para comérselos. Qué ternura. Pero una cosa: hay alguna palabra o expresión que me chirría en un lenguaje infantil, como "seré comedido"... Pero, lo dicho, es como la misma nube ese beso volado.
ResponderEliminarAbrazos, Mónica.
Una pieza que rezuma inocencia. Ternura absoluta.
ResponderEliminarMe voy con una sonrisa llena de recuerdos pegada en el rostro.
Un abrazo.
Oh! Xesc, es de los más bonitos y tiernos que he leído con esta frase del ReC. Me encantan esos besos volados.
ResponderEliminarMuchos de esos.
Hola Mónica y compañia,
ResponderEliminarTe escribo porque he visto tu blog y puede que te interese participar en este certamen de microrrelatos.
http://www.ventadepisos.com/concursos/microrrelatos.html
Tierno como la nube de azúcar... Te descubrí por casualidad y me quedo para leerte.
ResponderEliminarUn saludo cordial,
María Eva.
Saludos María Eva!
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tus palabras y tu visita. Me voy de paseo, a encontrarte.
Brillante Brillante Brillante Brillante :)
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